El rol transformador del sector privado para un Perú sostenible, unido y desarrollado

Al iniciar un nuevo año y acercarnos al Bicentenario de nuestro país, en CONFIEP hacemos un llamado al sector privado para reforzar el rol transformador que nosotros, como sector privado, debemos asumir e incorporar en nuestras organizaciones.

Se trata de un rol transformador que implica una Nueva Cultura Empresarial enfocada en el Bien Común, para crear y brindar más y mejores oportunidades para todos los peruanos e identificar el camino hacia un Perú sostenible, unido y desarrollado.

Esta ha sido nuestra invocación a los hombres y mujeres de empresa que nos acompañó durante la reunión realizada para compartir nuestra visión hacia el futuro.

Siendo una organización que lleva 34 años promoviendo el desarrollo de la actividad empresarial orientado al bienestar de todos los peruanos, a través de la inversión privada y generación de empleo, estamos convencidos que debemos seguir apostando por ese compromiso, poniendo el énfasis en que cada decisión de inversión empresarial debe estar acompañada de principios éticos.

El Bien Común

Los empresarios cumplimos un rol fundamental en el desarrollo del país y en la creación del BIEN COMÚN no sólo por el aporte que generamos a la economía del país que se estima en 60.8% del PBI, sino por las oportunidades que generamos a través del empleo de miles de hombres y mujeres de distintos niveles socioeconómicos, de costa, sierra y selva, peruanos diversos que quieren para ellos y sus hijos un Perú mejor.

Tenemos la gran responsabilidad de contribuir a generar más y mejores oportunidades, tanto formativas como de empleabilidad. Uno de los aportes fundamentales que podemos hacer nosotros como sector privado es trabajar de manera colaborativa con la academia y el sector público, para que, por un lado, los jóvenes incrementen sus oportunidades de empleabilidad, y por ende, mejores ingresos; y, por otro lado, las empresas elevemos nuestra productividad al contar con profesionales que se adecúen de mejor manera a nuestras necesidades. Por tanto, es indispensable acercar los contenidos de la educación a las necesidades del mercado laboral.

En ese sentido, en CONFIEP hemos suscrito convenios con universidades públicas y privadas con la finalidad de colaborar en acortar esa brecha, tomando como base: la innovación. En noviembre pasado presentamos “La Triple Hélice”, junto a la UNMSM, representada por su Rector, el Doctor Orestes Cachay, y el Presidente de la República, Martín Vizcarra, se trata de un modelo de colaboración y promoción del talento, que propiciará el debate en la agenda nacional, sobre la necesidad de atender los requerimientos del sector productivo y la adecuación de los perfiles profesionales. Asimismo, algunos de nuestros Gremios están también comprometidos con este objetivo, habiendo implementado los Consejos Sectoriales de Competencias que contribuirán a mejorar las oportunidades y la empleabilidad de los más de 250 mil jóvenes peruanos que entran al mercado laboral anualmente.

Igualdad de Oportunidades

Es otra línea de acción que se suma a la de educación. Lograr esta meta es un objetivo global, no solo porque se trata de un derecho fundamental, sino porque es esencial para el bienestar y desarrollo de las sociedades. En CONFIEP, cuando hablamos de igualdad de oportunidades, no solo nos referimos a lograrla entre mujeres y hombres; sino, también a establecer las bases necesarias para que todos los peruanos, sin distinción de raza, género o condición física puedan contar con un sistema digno y justo, en el cual, todos tengan las mismas posibilidades de acceder al bienestar social.

¿Qué hacemos desde CONFIEP? Contamos con importantes alianzas con diversas organizaciones nacionales e internacionales que promueven el balance e incorporación del sector femenino al ámbito ejecutivo; desde el 2005 buscamos erradicar cualquier práctica de discriminación en el empleo con la finalidad de fomentar un trato adecuado y sin distinciones; asimismo, desde el 2007, y a través de la Asociación “Empresarios por la Educación” —la cual me siento orgulloso en mencionar que nació en CONFIEP—, favorecemos el acceso de niños y niñas a cientos de escuelas en el interior del país. Coordinamos con organizaciones que promueven la inclusión laboral de personas con discapacidad, quienes representan el 10% de la población nacional.

Sostenibilidad

Esta es también otra de nuestras responsabilidades. CONFIEP tiene a su cargo la Secretaría Técnica del Pacto Global de las Naciones Unidas en Perú, y desde este frente, promovemos una conducta empresarial responsable, con la suscripción voluntaria de Principios Universales referidos a temas como el respeto a los derechos humanos, la lucha contra la corrupción, la agenda laboral y ambiental. Impulsamos los ODS en el entorno empresarial, generando espacios para la promoción de las buenas prácticas, el acceso al conocimiento, la participación en las discusiones de la agenda global de desarrollo, entre otros.

Retos frente a la revolución industrial

Asimismo, hoy, más que nunca, necesitamos generar, potenciar y fortalecer ecosistemas de trabajo para enfrentar la Cuarta Revolución Industrial, que ya se encuentra aquí entre nosotros, y no podemos permitirnos desperdiciar esta oportunidad.

En esa línea, fomentamos la innovación tecnológica como elemento básico para el desarrollo y crecimiento de todas las organizaciones. Este, sin duda, es el nuevo desafío de nuestras organizaciones: repensar los modelos de negocio, identificar oportunidades, desafíos y espacios para articular con emprendedores, startups, inversionistas ángeles, incubadoras, quienes sin duda, pueden colaborar con las grandes empresas en la mejora de sus procesos. En este sentido, tenemos una gran responsabilidad de generar más y mejores oportunidades a través de la creación de un ecosistema digital que permita integrarnos para mejorar las condiciones de vida de la población.

¡Más y mejores oportunidades para todos los peruanos!

Hacemos un llamado urgente al sector privado a actuar en esta nueva cultura en las empresas QUE BUSQUE ESE BIEN COMÚN. No se trata sólo de promover las inversiones, no se trata sólo de generar más empleos, no se trata sólo de nuestra contribución fiscal, se trata de instaurar, en cada una de nuestras decisiones, en cada una de nuestras acciones: principios éticos y participativos. No podemos quedarnos como espectadores.

Recuperar la confianza

El 71% de los peruanos perciben a los empresarios como altamente propensos a cometer delitos de corrupción. Tenemos que asumir un rol más activo para enfrentar este sentimiento generalizado y recuperar la confianza y credibilidad perdida por parte de la población. Confianza que nos permita, finalmente, continuar mejorando la calidad de vida de todos los peruanos a través del crecimiento económico y el valor compartido.

La lucha frontal contra la corrupción es agenda principal de CONFIEP y nuestros gremios asociados, y seguiremos trabajando con firmeza en esa línea.

Así lideramos la elaboración de un conjunto de Recomendaciones y Planes de Acción sobre Transparencia, Integridad y Lucha contra la Corrupción, que fue presentado ante 33 Jefes de Estado de la región en la Cumbre de las Américas que se llevó a cabo en Lima, en abril del presente año.

En el 2016, desde CONFIEP promovimos la creación del Consejo Privado Anticorrupción – CPA, en el que participan 24 asociaciones hasta hoy, entre gremios empresariales y organizaciones relevantes como Proética y Transparencia, representantes reconocidos en esta lucha contra la corrupción; aprovecho el momento para invitar a sus representadas a sumarse a este espacio desde el cual el sector empresarial busca liderar de manera activa la lucha contra este mal endémico.

Institucionalizar el diálogo público-privado

Otro aspecto muy importante es la necesidad de institucionalizar la articulación y diálogo público–privado para diseñar e implementar acciones conjuntas que lleven a un trabajo coordinado para alcanzar resultados concretos en el desarrollo de condiciones que fomenten un crecimiento sostenido y mejore la calidad de vida de los peruanos.

El Perú necesita contar con más líderes íntegros que construyan el futuro de la patria con humildad, pero con decisión y firmeza. Con profesionales que respeten la ley y a las personas; que cuenten con una visión de futuro y compromiso con su patria y que sean protagonistas en la construcción de un país mejor.

Finalmente, este encuentro empresarial ha permitido reafirmar que la empresa privada continuará trabajando por un sistema ético, competitivo y comprometido con el desarrollo del país.